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  4 de Septiembre de 2009

¿Y cómo iba a ser el Brill Building?

De lo que pasó dentro del Brill Building de Nueva York se ha hablado mucho en las últimas décadas. Sabéis que en este edificio del 1619 de Broadway, en Nueva York, tuvieron sus oficinas decenas de editoras musicales. También había despachos de emisoras de radio y pequeños estudios de grabación. Así todo estaba concentrado en un inmueble, de manera que un agente o un productor podían escuchar canciones recién compuestas, comprar las que les gustaban, arreglar el papeleo y hasta acordar su promoción en la radio. Todo en unas cuantas horas.

Detalle de la entrada del Brill BuildingEn el Bill Building se encontraron casi todos los grandes compositores de canciones de las décadas de los 50 y 60, desde Carole King a Leiber y Stoller, Pomus y Shuman o Boyce & Hart, por sólo citar a algunos. Pero del edificio en sí no se habla nunca. Como aquí, en Pop Thing, somos muy aficionados a la arquitectura (¿ya has leído nuestros otros artículos sobre la Tribune Tower o el Book - Cadillac?), queremos escribir hoy sobre este inmueble de 1931, que iba para rascacielos inmenso y se quedó en algo bastante más modesto.

La carrera por construir cada vez más alto comenzó en Nueva York hacia 1890. La ciudad dejó atrás a Chicago (que había empezado un poco antes) y vio como sus calles empezaban a poblarse de edificios de doce o quince alturas. En 1908, el Singer Building llegó ya a los cuarenta y siete pisos de alto. En 1913, el Woolworth Building alcanzó los cincuenta y siete. Una vez superadas las dificultades técnicas que impedían sobrepasar cierto tope, el criterio para construir rascacielos fue económico: si era rentable, se hacía. Y era rentable si el inmueble, una vez terminado y alquilado para oficinas o viviendas, lograba ingresar cada año rentas suficientes como para mantenerlo y dejar un beneficio a los promotores. Fácil, ¿no?

Sí, fue muy fácil mientras la actividad económica fue boyante, pero los problemas llegaron con la Gran Depresión de 1929. La recesión provocó que edificios nuevos (como el Empire State Building) quedaran vacíos casi por completo o en gran parte, sin que nadie quisiera comprar o alquilar espacio en ellos. Otros, los que todavía eran un proyecto, nunca llegaron a completarse tal y como habían sido diseñados. El Brill Building fue uno de estos últimos. Iba a batir récords, pero no pudo ser así.

Abraham Lefcourt, el promotor del Brill, era un avezado hombre de negocios que construyó rascacielos de estilo Art Déco por todo el Midtown neoyorkino. Con el Brill Building, su meta final era crear un inmueble espectacular, destinado al uso de banqueros y corredores de Bolsa. La prensa mencionó que la intención de Lefcourt era sobrepasar en altura al Empire State y al Chrysler Building, lo que ponía a su proyecto por encima de las cien plantas. Pero llegó la crisis de 1929, Lefcourt perdió buena parte de su fortuna en la catástrofe bursátil y los inversores privados que apoyaban su idea se retiraron. Pese a que el solar adquirido daba para una construcción de mucha más envergadura, Abraham sólo pudo levantar un edificio de once pisos, y aún así no consiguió alquilar el espacio resultante. Poco después de su inauguración, en 1931, Lefcourt vendió el inmueble a los hermanos Brill, que ya tenían una tienda en la finca y que pusieron su apellido al edificio. Los banqueros y los agentes de Bolsa nunca llegaron a pisar el Brill: como alternativa, los hermanos permitieron que las editoras musicales se instalasen en las oficinas vacías. Y así fue cómo nació la leyenda de este rascacielos venido a menos. Una curiosa historia...

Extra Bonus Info: aunque hoy tendemos a creer que todos los grandes autores de canciones pasaron por el Brill Building, la realidad nos dice otra cosa. El Brill no fue el único edificio de su zona en el que había editoras musicales. En Broadway, justo enfrente, en el 1650, había otro. La mayoría de los profesionales de la música iban de un inmueble al de al lado según las necesidades del momento, aunque el Brill siempre fue un lugar de encuentro para la mayoría. Y él se quedó con la gloria...

Escrito por Equipo de Pop Thing el 4 de Septiembre de 2009 · 07:52 AM

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