Pop español de los 60: Brincos; ensayos en 1964

Tener la oportunidad de conocer a un miembro fundador de Los Brincos es todo un honor y un privilegio. Si tal circunstancia se da en el ámbito de una web como Pop Thing, dedicada a la divulgación de la Cultura Pop de los 60, ni os contamos cómo nos sentimos de felices. Manolo González, el bajista del mítico grupo, se ha brindado muy amablemente a colaborar con nosotros, para que se sepa más sobre un conjunto del que sólo se conocen unos datos básicos (repetidos una y mil veces a lo largo de los años) pese a su importancia capital para el desarollo de la música pop en España. En esta entrega, Miguel Valpuesta Landa, el 'dire' de Pop Thing, pregunta a Manolo sobre el periodo formativo de Los Brincos en 1964.

Manolo González: "Los primeros ensayos de Los Brincos se hicieron en el trastero de una azotea. Como seguramente ya conoces, tanto Fernando Arbex como Juan Pardo y el resto, componíamos nuestras propias canciones. Ésa era una de las premisas a la hora de crear Los Brincos: la autoría musical propia sin depender de otros autores extranjeros. Teníamos una especie de pacto por el que nos comprometíamos cada uno de los cuatro componentes del grupo a aportar ideas de nuevas canciones para conseguir tener un repertorio digno de ser grabado y posteriormente interpretado en público. Ni que decir tiene que los que mayor número de ideas aportaban eran Fernando y en segundo término, Juan. Junior que es un músico excelente como todos sus hermanos, era quizás demasiado perezoso o tal vez muy exigente consigo mismo a la hora de componer. En cualquiera de los casos, sus aportaciones eran mucho más escasas que las de Fernando o Juan. ¡Yo tampoco le iba a la zaga en eso de la pereza! En mi descargo, tengo que aclarar que mientras Fernando era capaz de coger una guitarra, un vaso de whisky y pasarse las madrugadas intentando crear algo, mi producción, realmente escasa, fue fruto de la inspiración en un momento dado".

"No quiero decir con esto que la música de Fernando fuera menos inspirada que la mía, sino que mi pereza e incapacidad para componer en la forma que él lo hacía, no propiciaron precisamente una gran producción por mi parte a lo largo de nuestra historia. Pero de eso ya hablaremos más adelante. Por lo que respecta a mi aporte personal en la creación colectiva, te diré que siempre he tenido buen oído y un sentido de la armonía bastante acentuado. Gracias a mis hermanos mayores, grandes aficionados a la música clásica, me acostumbré a escuchar en casa este tipo de música. Y eso es una buena educación para la "oreja". Pero lo que se dice componer, componer... no componía por aquel entonces absolutamente nada".

"Dicho esto, debo aclarar que pese a ser Juan y Fernando los que aportaban mayor número de ideas, llegaban con ellas a los ensayos prendidas con alfileres, es decir, que de la idea original en embrión, al resultado que llegaba posteriormente a los consumidores de nuestra música, había un abismo. Por ejemplo: imagina que llegaba Fernando con unos cuantos compases de 'Mejor'. "Mirad que idea... a ver qué os parece..." - decía mientras empuñaba la guitarra de palo y tarareaba la melodía de algo que si lo escuchases ahora mismo, te recordaría vagamente a la canción que más tarde se colaría en las listas... La letra no había sido aún escrita por supuesto. Juan entonces sugería continuar la siguiente estrofa con estos acordes en lugar de aquéllos, y Junior prefería continuar en 're' mientras que a mí me sonaba mejor en 'la'. Era estupendo, una vez conseguido el consenso, ver cómo la estructura musical iba tomando forma... sólida, fluída, agradable al oído... Y luego venían las voces... Juan y Junior eran sin lugar a dudas dos voces excelentes. Mientras Juan derrochaba energía Junior, más moderado, era el contrapunto más sereno y dulce. Siempre tuvo un estilo a lo Cliff Richard a la hora de interpretar, e incluso su timbre de voz recordaba al cantante británico. Tenía (Junior) un gusto exquisito en sus aportaciones musicales. Juan era en ese sentido, la chispa hispánica. A veces era necesario filtrar esa aportación, ya que el exceso de especias puede dar al traste con el guiso... ¡ya me entiendes! Fernando y yo por aquella época, hacíamos coros y segundas voces. Normalmente a mi me tocaba la voz más alta de todo el registro, con lo que tenía que tirar del falsete casi siempre".

"Por último, estaban los detalles, aquéllos que pueden hacer muy comercial y pegadiza una canción. Concretamente en 'Mejor', tanto los arpegios con los que comienza la canción como el cierre final con esa llamada al 'Yankee Doodle', fueron ideas de Junior. Y estarás de acuerdo que son dos detalles bien recordados por los aficionados a nuestra música. De todos modos, la suma de todas estas aportaciones, la mía incluída, hacía de aquellas ideas en proyecto, los futuros éxitos que entrarían más tarde en las listas. No se puede negar a estas alturas la genialidad de Fernando como compositor y hombre de ideas. Sin él, Los Brincos no hubieran existido, mientras que él siempre habría sido Fernando Arbex. Pero tan cierto como éso, es que nuestra música siempre fue una labor conjunta de los componentes del grupo, y la personalidad y el sonido de nuestras canciones no puede ni debe ser achacada a Fernando, Juan, Junior o Manolo en particular, ni más tarde al resto de componentes que fueron pasando por el grupo. Nunca me cansaré de repetir esto... Ya te iré contando más adelante detalles que me vayan viniendo a la memoria y que sean de algún interés, pero en síntesis todo lo anteriormente dicho fue el día a día de los ocho meses de 1964 que pasamos encerrados en aquel trastero de la terraza, en el 26 de la calle Almagro de Madrid".

Interesante, ¿verdad? Pues no te pierdas lo que Manolo nos ha contado sobre el supuesto 'casting' de Los Brincos en el segundo capítulo de sus Brinco Historias!

Escrito por Equipo de Pop Thing el 6 de Noviembre de 2006 · 04:54 PM